Reunión Enero

Despertando del letargo en que las navidades parecían habernos sumido, aparecieron un par de relatos.  Luego un mail y una llamada. Faltaban cuatro días para la reunión que además debía continuar con una comida. Despertamos de golpe. Una lluvia incesante de mails recordatorios, confirmaciones y  selección de platos del menú, nos abrieron el apetito y un aguacero de cuentos nos inundó justo el día anterior.

 

Ni siquiera el nitrógeno, que dificultó nuestra respiración, pudo impedir que se crearan una docena de historias, ya fuera como símbolo químico en una clase de química, en estado gaseoso o líquido, inundando un escenario, conservando muestras en un laboratorio, impulsando un cohete o como ingrediente de un postre de lujo; como componente de una estrella muy especial, o dando nombre a una obra maestra. Todo valía y nos ha llevado por escenarios variopintos: bajo el mar como arma homicida, en un restaurante junto a la pareja deseada, entre músicos importantes o bajo el balanceo de la luna donde danzan las hadas.

 

La angustia se ha intentado colar por todos ellos pero la hemos apartado con conciertos de artistas internacionales e incluso de grillos, todos distintos, algunos reales y otros soñados.

 

Para el próximo día viajaremos por otras sendas guiadas por las palabras:

 

INTENSO      —        LUZ    —        CARAMELO

INTENS         —        LLUM —       CARAMEL

 

que auguran dulces historias que viviremos con intensidad bajo la luz de una luna de caramelo.

 

Y hasta el  próximo 5 de Febrero.

 

¡Felices sueños! ¡ Felices cuentos!